A toro pasado se
dan buenos capotazos, pero en el terreno es donde se debe demostrar la valía de
un grupo de bien pagados que se presupone son con diferencia superiores a sus rivales.
Eso es sobre el
papel, sobre el césped esa diferencia se diluyo y no poco a poco, si no casi
desde el inicio, más tarde en los minutos medios, para terminar con la suerte,
de un mal arbitraje, que les concede una posición de privilegio que no debían de
ostentar .
Al final de
temporada en lo más alto de la clasificación estarán el binomio de costumbre,
para mal del fútbol español en el apartado de clubs en la liga de primera
división. Un tercero en discordia habrá, pero posiblemente, y sin posiblemente,
más allá de los veinte puntos. Es esta una liga donde el Madrid y el Barcelona
son mejores por que poseen el poder adquisitivo necesario con que afrontar la
temporada; es seguro que a estos dos equipos no les interesa que cambie la
situación, que los dineros se sigan repartiendo como hasta hoy, y que los
mandamases del fútbol continúen dando el beneplácito a una legislación
trasnochada y partidista.
Esto viene a
cuento porque un árbitro puede equivocarse, ser deshonesto con su profesión,
estar mal preparado físicamente y que eso le lleve a pitar un mal partido, o
cien, desde lejos y de oído, o pudiera ocurrir, que el reglamento sea un
desconocido con el que se lleva mal, y en el caso que nos ocupa, muy mal.
Un equipo como el
Real Madrid, que presume de contar en su plantilla con unos jugadores de elite
mundial, no debería de llegar a los minutos de descuento, ni siquiera, con un
resultado apretado cuando uno por uno los rivales son inferiores técnica y físicamente.
Aunque estuvieren por encima de ellos en fuerza mental, ganas de agradar a su
público, táctica y planteamiento, no debiera de ser motivo para que se llegue a
tener que afrontar estos de manera en que se tenga que depender de la fortuna o
de lo expuesto. Hay que evitar que se deba de llegar a estos límites.
El entrenador del
Real Madrid no tiene indudablemente una barita mágica, pero que no tenga aún
una alineación conocida, un asentamiento en el juego, me inclina a pensar que
ha perdido el norte y no encuentra el sur, va de este a oeste, y ya es tiempo
de quién deba hacerlo le coloque en el camino correcto o le agasaje con una brújula…que
funcione.
Si esto continua
así, los “milagros” dejaran de pitar a favor y se volverán lanzas, así es que
quién deba ha de tomar las medidas necesarias para hacerle un buen traje a este
equipo debe de hacerlo ya, o más pronto que tarde volveremos a degustar las
mieles del fracaso deportivo.
T.S.G. (Aes sin hache)
26.9.2013.
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