domingo, 26 de mayo de 2013

José Mª Alfredo Aznar López.


     Desabrido ex presidente:
     Gracias a sus incontrolables deseos de salvador de la patria, y sus más que medias mentiras, el pueblo español le agradeció sus servicios con una hermosa patada en el culo en las elecciones del 2004 que le supo a “gloria”.
     Le agradecimos en su tiempo, y aún hoy, su encomiable labor por crear una preciosa burbuja inmobiliaria de la cual disfrutamos con vehemencia tras años de “honorables beneficios para sus allegados y amigos “gurteros”.
     Del compadreo con su amigo del alma Miguel Blesa al que colocó al frente de Cajamadrid, y con la "impagable" ayuda, años despues, del señor Rato, a ambos no agradeceran bastante todos los "beneficiados", aúnque se esmeren en ello, el tiempo dedicado a su gestión, basada, conocido es por todos, en la HONRADEZ y el apoyo a los más necesitados mediante las preferentes. Un hermoso culmen a tan alto sentido del deber.
 
  En la guerra de Irak es donde en su papel de marioneta en la política  mundial ejecutó una más que meritoria labor que le valió su candidatura al Oscar de aquel año.                         
   Le gusta más una portada que a un goloso un dulce. Ese, y su egocentrismo, fueron el detonante que le elevó a su máximo protagonismo junto a José  Manuel Durao Barroso, Tony Blair, y George W Bush, (fotografía reproducida de Wikipedia), en este vergonzoso encuentro en tierras portuguesas, hecho que se refrendó con una de las páginas más bochornosas de la historia de España.
     El ex presidente estos días vuelve por sus fueros y pierde el sentido de la realidad, aferrándose al clavo, de una clase media, que tiende a desaparecer por las nuevas directrices políticas, e intentado portar una  bandera que por sí él se adjudica, porque hoy, como anteriormente ya sucedió, no está capacitado para representarse ni así mismo; resbala en una actualidad que le sobrepasa, balbucea incoherencias, y consigue, harto difícil, que incluso su partido le dé la espalda, y apoye, por una vez y sirviendo de precedente, a un presidente que dentro de su sinsentido y vaivén es el representante de un grupo que le eligió por unanimidad.
     Sr. ex, quiero recordarle que en las primeras elecciones que ganó el PP. y le llevaron a usted a la Moncloa, las ganó con mayoría simple, y que se apoyó en un pacto con el PNV y CIU (vascos y catalanes) para poder gobernar, y que en su segunda legislatura al frente del gobierno, ya con mayoría absoluta, impuso usted el rodillo de esta para hacer y deshacer sin encomendarse ni a dios ni al diablo, ejerció de “pequeño dictador democrático”, y se fue más cabreado que una mona por la puerta falsa. Ese es usted aún hoy, y las penurias de hoy son una parte incontestable de su herencia.
     El ex, para desgracia de todos los madrileños, de lo único de lo que realmente se ha privado estos años es, a tiempo parcial, de una botella, vacía, cascabelera, altisonante, e insustancial en todo, que ni siquiera de adorno sirve. Sr. ex, llévesela a casa y rellénela si se puede, quizá a usted le dé juego, pero póngala un corcho, que cuando se caiga su desparramo no perjudique a nadie.
    Un consejo de practicante de urna nacional: sr. ex, calladito está usted más “guapo”.
T.S.G. (aes sin hache)
26.5.2013.

domingo, 19 de mayo de 2013

La temporada del Real Madrid C. de F.


     Para un equipo de la historia y la estructura de Real Madrid una temporada en “blanco” no deja de ser una anomalía. También es cierto que un equipo, sea de competición deportiva o de otra índole, no puede alcanzar siempre el puesto privilegiado de guía.
     La historia cuenta los hechos acaecidos, pero para el aficionado, seguidor, servidor o hincha, cualquier año que no encumbre a su club, es, si no un fracaso, una decepción.
     Este año el Real Madrid se ha visto privado, de ese honor, por meritos propios, y por desméritos, que todo hay que decirlo, de un entrenador prepotente, incapaz de asumir sus errores, mirarse el ombligo, entonar un “mea culpa”, y asimilar que si existe un dios no es él. No se puede coartar la libertad de opinión de un jugador porque no esté de acuerdo con sus ideas ni sus razonamientos, por otro lado, los jugadores tienen la obligación de acatar las órdenes y tácticas deportivas y relativas al reglamento interno del club, en esto no debe de existir duda alguna, sus comportamientos deben de ser ejemplares, en todos los órdenes, por la influencia que ejercen sobre sus seguidores, por la exigencia de su contrato (sobradamente  remunerado, pero eso es otro cantar), y por preservar la imagen de un club señor, respetuoso con sus rivales y lugares donde ha disputado encuentros (excepto en contadas ocasiones); durante más de un siglo han sido, y son, enseña de deportividad, el bien hacer les ha reportado títulos y honores, galardones y trofeos, y lo que es más importante, el cariño y el afecto de todos por encima de rivalidades y contiendas deportivas.
     En esto hay que hacer irremediablemente hincapié: Hincapié en el mal gesto que tuvieron el entrenador José Mourinho y  el jugador Cristiano Ronaldo al término del partido que les enfrentó al At. Madrid, ambos no supieron estar a la altura, que se presupone deben de ostentar y hacer pública, dada la entidad del club al que representan. Guardar las formas y cumplimentar al ganador incluye subir a la tribuna a recoger la medalla con que les premia y honra como subcampeones de la competición de Copa de SS.MM. el Rey correspondiente a la temporada 2012 – 2013; una mala opción que dice más, de un estilo revanchista, de niñatos mal criados, llorones y egoístas, que de gente de bien. Con su gesto dejaron a la mayoría de los socios, seguidores, simpatizantes, y al club al que se deben, y paga, en mal lugar, despreciando a su vez la figura del Jefe de Estado, que es quien da nombre al título en cuestión.
     Vergüenza siento como madridista, y deseo expresar que estos personajillos a mí no me representan con tan penosa actitud. Desde el desencanto de la derrota, más allá de merecimientos ¡Aúpa Atleti!   ¡¡¡Hala Madrid!!! Siempre.

T.S.G. (aes sin hache)


19.5.2013.

lunes, 13 de mayo de 2013

La mujer en la religión islámica.


     No creo que sea muy gracioso ataviarse, ni de manera simbólica, ni de pensamiento, de radical islamista, ni siquiera de islamista moderado. Cuando las distintas tribus de creencias musulmanas (miles), comiencen a respetar a las mujeres, a ser su igual, y aportar al mundo algo más que odio, creeré que sus palabras de paz no son el medio del que se valen para exigir igualdad religiosa y respeto a sus tradiciones en occidente, a la par que niegan estas en sus países de origen, alegando estas mismas tradiciones, y exigiendo este mismo respeto, a sus costumbres y sus leyes para los suyos y para los que viniendo de otros países viven en él. Para estos no existe, ni mucho, ni poco, respeto a su religión, sus costumbres, sus leyes, su manera de vivir, pues para ellos son sólo infieles que intentan corromper “SU” verdad, la única verdad, la suya. 
     Su MACHISMO, su san para mí, su poco respeto a una vida que no sea la suya, el burka, la servidumbre y el acatamiento que exigen a sus mujeres, las leyes que les exoneran de delitos como la ablación, la violación, el derecho de igualdad, de enseñanza, de trabajo remunerado, de liberar de la esclavitud a la que se ven sometida en sus hogares y fuera de estos, de venta de mujeres e hijas por intereses de todo tipo, de acabar con la lapidación por adulterio (también sólo en caso de que sea ella la adultera, para él, varón que comete el delito de hostigamiento y violación todo son parabienes a su hombría y halagos a su vanidad), y cientos, y miles de normas que duele hasta pensarlo.   
      En tanto y cuando no respetéis ni alcéis vuestra voz en defensa de quien sufre estas afrentas, no respetaré vuestra gracia por un atavió de prepotencia petrodólar, costumbrista radical, y farsa de mal gusto.
    Todas sus virtudes, que son muchas, se diluyen instantáneamente en sus otras “virtudes”, esas que atribuyen al Corán y que en realidad, de igual manera que en el catolicismo, judaísmo, anglicanismo, etc., son lecturas partidistas, añadidos de fieles e infieles, con intereses de gobierno, subyugación, y avaricia. Si “la religión es el opio del pueblo” que dijo Confucio, sus patriarcas, sus jefes supremos, son la irresponsabilidad más manifiesta y partidista de la justicia y la verdad.  
T.S.G. 8aes sin hache)
13.5.2013

sábado, 11 de mayo de 2013

ALFREDO LANDA. (con mayúsculas).


     Tres Alfredo forman de cierta manera parte de mi vida, dos fallecieron para desgracia nuestra y de las bellas artes, Alfredo Kraus y Alfredo Landa, en tanto el tercero aún continua en la brecha, Alfredo Di Stefano.
     Hoy irremediablemente me refiero a D. Alfredo Landa:
     Conocí a Alfredo Landa en El Círculo de Bellas Artes de Madrid, se encontraba con Manuel Galiana (otro gran actor aún en activo perteneciente a esa generación que se “retira” en silencio), y compartimos unos minutos agradables e impagables. Era Alfredo un hombre capaz de transmitir alegría, humor, risas y sonrisas porque reía en el día a día, le reían los ojos, las manos, y agradecía la vida.
     Tocó todos los palos de los comediantes, teatro, cine, doblador de películas, series y teatro en televisión, etc., sin olvidar que sus registros pasaban del humor al drama, y del hombre rudo al sentimentalismo. En todos los papeles en los que intervino supo estar, y de todos ellos extrajo lo mejor que el guión ofrecía, para satisfacción suya, y nuestra.
     Era un ser doliente cuando la vida le dolía, entrañable, cercano, amante del Dry Martini, de una copa de vino, una cerveza fría, una partida de Mus, un café, y el cariño de la amistad. Era ejemplar con quienes compartía sus películas, ósea, con todos, delante y detrás de la pantalla, sin un no para quienes nos alegró la vida, y sin una pizca de resentimiento ni rencor para aquellos profesionales del adulamiento y la puñalada.



Manuel Galiana, Tomás Serrano y Alfredo Landa en la calle de Alcalá de Madrid.

     Hablé con él, le di las gracias por los ratos de olvido y por los momentos en que silenció mi dolor, y me alegró; Me alegro de haber podido compartir esos instantes.
     Su biografía, y dentro de ella su filmografía, está ahí para quien quiera aprender de ella. No fue divo, y por eso mismo creó escuela; su peculiar forma de actuar saltó de las pantallas cinematográficas al español medio, y con ello llegó el Landismo. Era un hombre culto, osado y decidido, un hombre de “al pan, pan y al vino, vino”, serio cuando era menester, y con la cualidad de saber discernir lo que era su vida familiar de su vida pública.
     Gracias Alfredo, por el ayer, por hoy, y por mañana; tú te quedas con todos nosotros, porque únicamente desaparece tu cuerpo.
     Gracias "navarrico", gracias, mil veces gracias.
     ¡Viva el cine!
T.S.G. (aes sin hache)
10.5.2013

martes, 7 de mayo de 2013

Te contaré una anécdota:


         En el año 1904 Madrid bullía en tertulias. El ilustre gallego D. Ramón María del Valle-Inclán tenía la suya en el Nuevo Café de Levante, hervía por las noches con la flor y nata de los intelectuales de la Generación del 98 y los artistas más significados, entre ellos Ignacio Zuloaga, Gutiérrez Solana, Santiago Rusiñol, Mateo Inurria, Rafael Penagos, etc..
       Sucedió que la tarde noche del 13 de mayo de 1904, D. Pío Baroja, cuando se estaba hablando de los españoles y de las distintas clases de españoles, el novelista vasco sorprendió a todos y dijo:
      “La verdad es que en España hay siete clases de españoles... sí, como los siete pecados capitales. A saber:
1. Los que no saben;
2. Los que no quieren saber;
3. Los que odian el saber;
4. Los que sufren por no saber;
5. Los que aparentan que saben;
6. Los que triunfan sin saber, y
7. Los que viven gracias a que los demás no saben.
   Estos últimos se llaman a sí mismos políticos y a veces hasta intelectuales”.
     El tiempo transcurre, no se detiene por factores extraños, ni ajenos ni propios, más solo quienes sobrevivieron a millones de sus instantes nos indican que muchos ayeres siguen siendo hoy.
T.S.G. (aes sin hache)
7.5.2013.

sábado, 4 de mayo de 2013

Santiago Carrillo.


     Con este hombre desapareció una parte sumamente importante de la historia de España. No pretendo con estas líneas mostrar que parte de la historia le corresponde, cuales son realidad, y cuales bulos.   
     En esta generación, a la que por mi edad correspondo, vivimos las noticias que nos regalaba la dictadura franquista, abrimos los ojos a la política con ellas, y de ellas renegué cuando mi formación intelectual me mostro otros pensamientos y mundos. No comparto las ideas de esta figura que renegó de las doctrinas comunistas impuestas por la URSS de Stalin, por que antes las abrazó con tal ímpetu que fue incapaz de ver más allá de sus consignas, banderas, himnos, contra un imperialismo real, tan real como exageradas sus proclamas de igualdad proletaria. De idéntica manera no comparto las ideas de los camisas azules de antes de la guerra civil, ni las que aportaron al gobierno de Franco, tanto como no comparto ninguna dictadura sea de la ideología que fuere.
     Entre las sombras de Carrillo revolotean los hechos acaecidos en Paracuellos del Jarama, los cruentos asesinatos de una guerra de la que algunos pretenden, aún, no cerrar sus heridas. Por el contrario, sus mejores luces, fueron la aportación desinteresada, anteponiendo España a las normativas del partido comunista del que él era Secretario General, y de esta guisa, aportando a la incipiente democracia, no sólo una estabilidad, si no, con su actitud, un futuro de consolidación.
     Ya no es historia viva, pero guste o no guste fue, es, y será parte de la realidad de esta España de todos.
T.S.G.
4.5.2013.

miércoles, 1 de mayo de 2013

Doña Sofía, reina y madre.


     Comprendo que la labor de su majestad no es baladí, nieta, hija, esposa, madre, abuela, y reina. Saber llevar la carga familiar en lo que corresponde al lugar que ocupa cada persona, por encima de caprichos, libertades propias de la juventud y de los tiempos que marca la vida, requiere una enorme fuerza de voluntad, responsabilidad sobrevenida, un compromiso adquirido con el titulo y la dinastía, y un saber estar en múltiples ocasiones, en que estar es, ya por sí, una desagradable obligación del cargo.
     En estos días convulsos en que se mueve la casa real por razones, no de estado, si no de ansias de poder, de faldas millonarias, y de gentes que nunca soñaron llegar más allá de lo que los demás les valoraran, y que fuera de sus ámbitos eran meros desconocidos, y lo serian más en el transcurso del tiempo. Cuando te conviertes en mediocre en tus quehaceres diarios, y tu intelecto no da más de sí que para la vida fácil y la golfería, y cada uno que coja su vela, arrastra en la caída de su mediocridad instituciones, familia, imagen, y fotografías y haces pública la realidad de tu poca valía e incompetencia, su majestad da lecciones, y demuestra su enfado con el estilo propio de quien sabe que por encima de todos estos avatares se encuentran los intereses de un pueblo que la respeta, y por qué no, también sus intereses por perpetuar la dinastía que al fin y a la postre es su empresa familiar.
     No desanime sus días más de lo necesario, su enfado real, y su real enfado, también lo compartimos la inmensa mayoría de los españoles, que no súbditos, y apoyamos su hacer de tripas corazón en estos momentos.
     Reconocemos su malestar, y la exhortamos a que prevalezca en su sitio, con la cabeza fría en razones de estado, caliente en situaciones familiares, firme frente a los depredadores, y clara y limpia, no sólo en la imagen si no también en la realidad de la corona.
T.S.G. (aes sin hache)
1.5.2013.