Se criticó con extrema dureza, por todos
los partidos con representación parlamentaria y más, el hecho de que el
gobierno, hoy en funciones, aprobara los Presupuestos Generales
correspondientes al año en curso. Hoy todos ellos callan.
El dos de febrero Pedro Sánchez, a
propuesta de su Majestad el Rey Felipe VI, se dispone a intentar formar gobierno,
sabemos que llegar a formar gobierno no significa que pueda gobernar, ese será
otro cantar, para las conversaciones e intentos de acuerdos precisa no menos de
tres semanas, después la aprobación del Congreso de los Diputados, jurar o prometer
el cargo, notificación de propuesta al SS.MM. el rey al completo del nuevo
gobierno, jura o promesa de este, traspaso de carteras, etc..
Dándose
las circunstancias apropiadas, y de que se cumplan los plazos en tiempo y
forma, hasta finales de marzo o primeros de abril no se constituirá nuevo
gobierno, más si los acuerdos no llegaren, habría que poner en marcha la “maquinaria”
electoral de nuevo, lo que nos llevaría a nuevas elecciones. Esta situación,
previsible, prolongaría “el circo” hasta finales de mayo o entrado el mes de
junio.
La realidad es que de no haberse aprobado
los Presupuestos Generales, hoy España se vería en una situación que se antoja
delicada y con un gobierno en funciones solicitando adelantos financieros a
cuenta de los presupuestos por aprobar.
La cuestión es que en este país de panderetas
hemos pasado de que éstas las toquen las tunas a que las hagan sonar los
“tunos”.
¡VIVA LOS PASACALLES!
T.S.G.
5.2.2016.
No hay comentarios:
Publicar un comentario