No debemos permitir,
en el siglo en que vivimos,
expandan en su existir
por el orbe, su elixir,
talibanes asesinos.
Sus viles, crueles hazañas,
Se clavan en mis entrañas
por tu padecer mujer,
de la violencia por ser
mujer, madre, hija, y
extrañas
…en el mundo del querer.
Amarte, no es poseer,
ni sentirte, obligación;
siempre existe solución
el partir, si es menester;
más no el de causar dolor
a quién te entregó el amor.
A quién te quiso querer.
Metáfora es corazón.
Realidad, muertas en vida.
Vergüenza que consentida
sea en su “hombría” un
palizón.
Permitidme que hoy no ría
como en mí es habitual,
pero aún no me da igual
compartir tal felonía.
Matas y hablas de
despechos
violas y hablas de razón,
maltratas, y a la sazón
vas proclamando derechos.
Perjuras, y hay están tus
hechos.
Injurias y hay está tu DON.
Eres cobarde y traidor.
Eres desecho social.
Eres escoria y deudor.
Eres por ser, lo peor
que engendras el odio racial.
Se trata de echar valor
y de contener la furia,
sabiendo, que en tu temblor,
descubriría en el helor
miedos de años de penuria.
Amarte, no es poseer,
ni sentirte, obligación;
siempre existe solución
el partir, si es menester;
más no el de causar dolor
a quién te entregó el amor.
A quién te quiso querer.
T.S.G.
tmsg1953@gmail.com
9.4.2014.
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